En un accidente, una vez identificados los riesgos de la escena y la situación de las posibles víctimas, los responsables sanitarios deben proceder a su atención. Para ello, el equipo de emergencias siempre debe asistir protegido con su EPI (Equipo de Protección Individual): casco, gafas de protección, botas de seguridad, guantes de seguridad (bajo los cuales se llevan los guantes asistenciales para contacto con la víctima) y mascarilla de alta filtración.
Estabilizado el vehículo, los bomberos indicarán el acceso más seguro. Uno de ellos, que posteriormente creará espacio en el interior del vehículo para una mejor atención a la víctima, ayudará a los responsables sanitarios a acceder a su interior. Una vez dentro, se realizan unas medidas iniciales de seguridad y de creación de espacio interior para poder asistir a la víctima con seguridad.
Seguridad inicial
Las medidas iniciales de seguridad en el interior del vehículo son las siguientes:
– Desconexión de la llave de contacto del vehículo.
– Echar el freno de mano.
– Meter una velocidad en la caja de cambios.
– Colocación del protector de airbag en el volante del conductor y distancias de seguridad.
Creación de espacio interior
El responsable sanitario deberá posicionarse frontalmente a la víctima lo antes posible, permitiendo de esa forma una mejor asistencia y facilitando la labor del bombero, responsable de los trabajos en el interior del vehículo para la creación de espacio y establecimiento de medidas iniciales de seguridad en el interior del habitáculo (ventanillas, llaves de contacto, airbags, burbuja de plástico de protección…)